Laura Chinchilla prestó juramento este sábado como presidenta de Costa Rica para convertirse en la primera mujer en la historia nacional que asume el poder en este país centroamericano.
Chinchilla juró en un acto realizado al aire libre en el parque La Sabana, en el corazón de la capital, ante unos 150 invitados especiales, entre ellos varios gobernantes y representantes de dos realezas europeas.
Acompañada por su esposo, hijo y sus padres, besó la banda presidencial y luego se fundió en un abrazo con el presidente saliente Oscar Arias, quien concluyó su segundo mandato luego de un primer periodo entre 198690.
La nueva mandataria, una politóloga de 51 años de edad, casada y madre de un hijo de 14 años, gobernará por cuatro años junto a un gabinete compuesto casi en su 50% por mujeres y con retos en los campos económico, social y ambiental, donde destacan la reactivación económica y la lucha contra el narcotráfico.
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